La relación del niño o la niña con la comida definitivamente marcará una alimentación positiva, consciente y nutritiva en su infancia. Este tema de gran relevancia en la crianza de niños y niñas debe ser prioridad en cada hogar. En esta ocasión, la Dra. Angie Jiménez, nutricionista pediátrica nos comparte 8 recomendaciones para una alimentación positiva desde la niñez.
Alimentación positiva:
Los niños son un claro ejemplo de cómo se alimentan papá, mamá o sus cuidadores; como mamíferos ese reflejo primitivo de supervivencia y de comer a lo seguro solo permite que coman lo que sus papás comen.
La relación que nosotros los padres tengamos con la comida será la misma que van a tener nuestros hijos con los alimentos. Por esta razón debemos de procurar que nuestra alimentación sea sana, variada, nutritiva y sobre todo tener una relación positiva con los alimentos. Somos los intérpretes sensoriales de nuestros hijos, y ellos necesitan identificar una alimentación segura.
Recomendaciones nutricionales para la niñez:
- Si desea incluir un alimento nuevo comience por probarlo usted primero y darle de su porción.
- Ofrezca el alimento nuevo en cantidad pequeña en un platito mini, no en el plato de su hijo.
- No presione para que lo coma, acompañe y valide su emoción. Por ejemplo; “tranquilo hijo (a) sino quieres comerlo ahora, lo podemos comer luego preparado de manera diferente”. Ofrecer muchas veces, la constante exposición del alimento, preparado en variedad de formas y el tiempo hacen maravillas.
- Refuércele que los gustos cambian. “Antes no te gustaba el aguacate, ahora te encanta en guacamole”
- Horarios y rutinas, si aún no los tienen será más difícil que tenga hambre y coma bien. Los niños deben de acostarse a dormir temprano, un sueño reparador ayuda a que tengan energía, jueguen mucho y sientan hambre.
- La comida no se castiga, se premia o se soborna. Es un acto voluntario y placentero que se disfruta.
- Todo lo que escuche su hijo o hija respecto a la comida (engorda, adelgaza, es mala) repercutirá en su etapa adulta. Los alimentos son nutritivos o no nutritivos, punto.
Regresamos el inicio; predicar con el ejemplo es lo mejor que podemos hacer los papás y mamás. Recuerde que la nutrición infantil es una montaña rusa llena de emociones, bajas, logros, pero sobre todo única y trascendental.
La Dra. Jiménez es parte de nuestra comunidad educativa, una mamá que comparte su conocimiento profesional de la mano de este espacio con el que contamos como institución.